Veril de las Anclas

Entre Lanzarote y La Graciosa, en un llano de arena, se levanta una gruesa barra de roca que se extiende cerca de un kilometro, cruzando El Río perpendicularmente, es el Veril de las Agújas. En él existen varias zonas de inmersión, como el Veril de las Lagostas al sur o la cueva de los Jureles al norte, entre ellas destaca el Veril de las Anclas.

Sus paredes, esculpidas por la erosión del mar, sirvén de refugio a gran número de peces como chuchos, pejeperros, abades, viejas y, de manera sorprendente por su escasez en el resto de Canarias, a corvinas negras. La inmersión tiene un aliciente histórico: la cantidad de anclas antiguas que reposan a lo largo del recorrido.

Características

  • Acceso: Embarcación
  • Dificultad: baja
  • Profundidad Máxima: 21m.